Los comestibles de cannabis ofrecen una experiencia comestible única de disfrutar de la hierba. Sin embargo, pueden resultar intimidantes, sobre todo si nunca los has probado o has tenido una experiencia negativa. Afortunadamente, garantizar una experiencia agradable, segura y responsable es muy fácil. Sigue leyendo para descubrir cómo hacerlo y disfruta de una experiencia comestible única.
Tomar comestibles de marihuana puede ser una experiencia desconcertante tanto para el consumidor novato como para el experto, pero no tiene por qué ser así. En este artículo explicamos qué son los comestibles, cómo interactúan con el cuerpo, y qué efectos inducen. También proporcionamos información sobre los beneficios que ofrecen en comparación con otras formas de cannabis, te enseñamos a dosificarlos correctamente, y compartimos algunos consejos para hacer tus propios comestibles de marihuana.
Los comestibles de cannabis se elaboran para, sí, lo has adivinado, comerlos. A diferencia de cuando se fuma o vapea, los compuestos del cannabis pasan al torrente sanguíneo a través del sistema digestivo. Por eso, tardan mucho más en hacer efecto.
Hay un montón de comestibles de cannabis, entre los que se encuentran algunas opciones clásicas como los brownies y las galletas, y otro tipo de dulces como las gomitas. Sin embargo, es posible preparar prácticamente cualquier comida con marihuana, y algunos de los productos más innovadores del mercado legal son las chocolatinas, los caramelos, salsas para pasta, limonada, trufas, café, miel, etc.
¿QUÉ DIFERENCIA HAY ENTRE LOS COMESTIBLES CON CBD Y CON THC? El cannabis contiene cientos de sustancias químicas, pero las dos más abundantes son el THC y el CBD; el primero, es el principal compuesto que le da a la marihuana su mítico efecto, mientras que el CBD es un elemento que no coloca y que se utiliza mucho en productos de salud y bienestar.
La principal diferencia entre los comestibles con CBD y con THC es su composición química y, por lo tanto, sus efectos. Los alimentos con THC colocan, mientras que los que llevan CBD no inducen este efecto. Pero ten en cuenta que algunos comestibles pueden contener distintas proporciones de THC y CBD, y por tanto, tener distintos efectos.
¿QUÉ BENEFICIOS APORTAN LOS COMESTIBLES? Los comestibles de marihuana ofrecen numerosos beneficios que los convierten en una alternativa muy atractiva a fumar, vapear y dabbear.
TIENEN UN EFECTO MÁS FUERTE Y DURADERO Puesto que el sistema digestivo descompone los comestibles de cannabis, no solo tardan más tiempo en hacer efecto, también ofrecen una liberación más lenta de cannabinoides. Un comestible con THC se traduce en un subidón más largo que aparece de forma gradual.
Los comestibles suelen contener dosis más altas de cannabinoides que unas cuantas caladas de un porro o vaporizador. Además, cuando se toman alimentos con THC, este compuesto es procesado por el hígado, donde se convierte en el metabolito 11-hidroxi-THC, una potente forma alternativa del THC que atraviesa la barrera hematoencefálica con mucha más facilidad que el delta-9 THC. Aunque los comestibles con CBD no producen efectos psicoactivos, este cannabinoide también se procesa en el hígado y se libera lentamente.
SON FÁCILES DE DOSIFICAR Otra ventaja de tomar comestibles es que son muy fáciles de dosificar. Cuando fumas o vapeas marihuana, tu mejor opción en cuanto a la dosificación es controlar el número de caladas que das. Pero no sabrás la cantidad exacta de cannabis que consumes. Los comestibles, por el contrario, hacen que calcular una dosis sea coser y cantar.
En algunos mercados legales, los comestibles de cannabis deben estar claramente etiquetados con la cantidad de cannabinoides que contienen en cada porción, para que los consumidores disfruten de una experiencia controlada y agradable. La dosificación de los comestibles caseros es un poco más complicada, pero aun así, es más fácil de calcular que con, por ejemplo, un canuto.
SON DISCRETOS Por desgracia, los consumidores de marihuana siguen siendo objeto de un montón de estigmas y estereotipos. Incluso los pacientes médicos son cuestionados por consumir productos de cannabis. Afortunadamente, los comestibles ayudan a escapar de ese estigma proporcionando una forma sencilla, discreta y sin humo de consumir marihuana, tanto con fines recreativos como medicinales.
TE PERMITEN EXPERIMENTAR Los comestibles se pueden preparar en casa con un poco de cannabutter o aceite de cannabis, que se pueden añadir, literalmente, a cualquier plato. Esto ofrece a los consumidores de marihuana la oportunidad de experimentar con dosis y recetas con el fin de encontrar nuevas formas de disfrutar de un efecto que no se logra fumando.
¿CÓMO SE DOSIFICAN LOS COMESTIBLES DE CANNABIS? Si tienes la suerte de poder comprar comestibles ya etiquetados, su dosificación es muy fácil. Es solo cuestión de seguir las instrucciones del envoltorio y modificar el tamaño de la porción según tus necesidades. De lo contrario, puede resultar un poco más difícil. A continuación, te proporcionamos unas pautas para facilitar este proceso.
Como regla general, te recomendamos ceñirte a las siguientes dosis en función de tus objetivos y nivel de experiencia:
Microdosis (2,5mg de THC): Una estupenda dosis de inicio para los recién llegados al mundo de los comestibles. Produce un efecto ligeramente edificante y mejora la concentración, además de calmar la ansiedad. Dosis baja (5mg de THC): Una dosis de este tamaño induce un efecto más estimulante y vigorizante. Puede que también experimentes un aumento de creatividad o sociabilidad. Dosis normal (10mg de THC): Lo que se suele considerar una dosis estándar de THC. Tras su ingesta, una dosis de este tamaño suele hacer efecto al cabo de aproximadamente una hora, y produce un subidón relajante que puede durar de 4 a 6 horas, dependiendo de tu metabolismo y química corporal tendrás una experiencia comestible única.
Dosis alta (+25mg de THC): Los consumidores con fines terapéuticos y las personas con un nivel alto de tolerancia pueden necesitar 25mg o más de THC para sentir un efecto sustancial. Sin embargo, para los novatos, esta cantidad podría provocar un subidón largo e intenso. Por lo tanto, es importante tener cuidado y dosificar adecuadamente.
Aunque dosificar tus comestibles caseros es un poco más complicado, podrás calcular cuánto THC añades a tus comidas, siempre y cuando conozcas el porcentaje de THC/CBD que contiene la hierba. Por ejemplo, si vas a utilizar 10 gramos de flores secas de cannabis (10.000 miligramos) con una concentración de THC del 10% para preparar 20 gramos de mantequilla, la cannabutter contendrá un total de 1.000mg de THC (el 10% de 10.000). Si luego utilizas esa mantequilla para hacer un lote de 30 brownies, cada brownie contendrá aproximadamente 30mg de THC.
¿CUÁNTO TARDAN LOS COMESTIBLES EN HACER EFECTO? ¿Y CUÁNTO DURAN? Cuando ingieres un comestible, tu sistema digestivo debe descomponerlo para que los cannabinoides comiencen a hacer efecto. El tiempo que esto tarde dependerá del tipo de comestible ingerido, de la potencia de la dosis, de tu metabolismo y de si tienes algo en el estómago. Además, tu tolerancia también juega un papel importante.
En general, deberías comenzar a sentir los efectos del comestible aproximadamente una hora después de su ingestión. Si no es así, espera otra media hora antes de aumentar la dosis. Esto se debe a que, aunque tarda en hacer efecto, el subidón de los comestibles suele aparecer de forma más intensa y rápida. Si sientes que no estás al mismo nivel que tus amigos y consumes más, podrías terminar teniendo una experiencia abrumadora. Recuerda: los comestibles no se consumen al mismo ritmo que un porro. Se necesita autocontrol y paciencia.
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