La Paradoja de la Legalidad y la Encarcelación
Oye, ¿cachai que en Estados Unidos mientras los dispensarios hacen su agosto vendiendo marihuana, hay gente como Michael Thompson que está pagando con cárcel por hacer lo mismo? Sí po’, en el mismo país donde en algunos estados te pueden vender cannabis como si fuera pan caliente, hay personas que están entre rejas por vender la misma yerba.
Estamos viviendo en un mundo donde, por un lado, el cannabis es visto casi como el pan de cada día en varios rincones, especialmente durante la pandemia, donde hasta fue considerado esencial en muchos laos. Pero por otro, la criminalización de esta planta sigue siendo una dura realidad, con una cantidad brutal de estadounidenses detenidos, y pa’ variar, los compadres negros son los que llevan la peor parte, siendo arrestados mucho más que los blancos.
Un Grito por la Justicia y la Igualdad
Con más de dos tercios de los gringos apoyando la legalización, y una industria que mueve millones y crea miles de pegas, uno se pregunta, ¿por qué aún hay gente en la cárcel por marihuana, compadre? ¿Por qué algunos se llenan los bolsillos mientras otros, como Michael Thompson, son tratados como criminales de la peor especie?
La respuesta corta es que la marihuana sigue siendo ilegal a nivel federal, y ni hablar de que no hay leyes que limpien el prontuario de quienes fueron condenados por algo que ya no es delito en varios estados. Pero este rollo es más complicado de lo que parece.
Un Viaje por la Historia de la Criminalización del Cannabis
La historia de cómo el cannabis se convirtió en el villano de la película es larga y enredada, empezando en los años 70 con Nixon y su Guerra contra las Drogas. Desde entonces, las políticas sobre drogas se pusieron cada vez más rígidas, con sentencias mínimas obligatorias y una onda de tolerancia cero que dejó a miles tras las rejas.
La cosa es que, aunque en varios estados el uso de cannabis es legal, el gobierno federal aún lo ve como algo peor que la heroína. Así que, si te pillan con un poco de marihuana, puedes terminar con una sentencia bastante pesada.
La Doble Cara de la Despenalización
Aunque se hable de despenalización, en varios estados las leyes siguen siendo más duras que un golpe de realidad. Por ejemplo, en Arizona, tener un poco de marihuana puede resultarte en una condena por delito grave. Es una locura que, mientras algunos se forran con la industria del cannabis, otros sigan siendo castigados severamente.
El Presente de la Criminalización del Cannabis en Estados Unidos
Desde el 2010 al 2018, hubo millones de detenciones por cannabis, representando casi la mitad de todas las detenciones por drogas. Y no olvidemos las brutales diferencias raciales en estas detenciones, donde los negros son mucho más propensos a ser arrestados que los blancos. La «reparación retroactiva» podría ser la clave para solucionar este embrollo, permitiendo que las leyes nuevas beneficien también a quienes fueron condenados en el pasado. Pero, lamentablemente, en el ámbito federal esta idea todavía no prende.
Más Allá de las Cárceles
Es cierto que no todos los detenidos terminan en la cárcel, pero el solo hecho de ser arrestado ya es un golpe bajo que puede dejarte marcado. Es crucial entender las consecuencias a largo plazo que esto implica.
Así que, mientras la industria del cannabis florece y más gente disfruta de sus beneficios, no podemos olvidar a aquellos que han sido injustamente castigados. Aunque entendamos las leyes que han llevado a esta situación, debemos seguir cuestionándonos: ¿realmente tiene sentido?
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