La primavera es un momento muy bonito en la vida de cualquier cultivador de exterior. Sin embargo, el solcito también atrae a una de nuestras mayores pesadillas: las plagas de la marihuana. Pero no te angusties, acá te voy a enseñar a prevenir y a descubrir a los invasores antes de que acaben con tu preciado cultivo
Más vale prevenir las plagas que lamentar tu marihuana
Cultivar en exterior, directamente en el suelo, es más seguro para evitar plagas de marihuana. Al cultivar en macetas las estás separando de su ecosistema, lo que facilita la reproducción de muchos insectos. El cultivo en indoor es más seguro; sin embargo, te conviene hacer una limpieza profunda con cloro entre cada cultivo y quitar rápidamente las hojas caídas y otros restos orgánicos.
Para evitar que aparezcan hongos, controla muy bien las dosis de riego. No vuelvas a regar hasta que estés seguro de que la tierra se secó completamente.
Puedes verificarlo tomando el peso de la maceta o introduciendo tu dedo en el sustrato hasta el segundo nudillo para ver si aún está húmeda. Además, asegúrate de quitar la humedad de los bordes de la maceta luego de regar para que no se acumule.
Si cultivas en maceta puedes prevenir la aparición de la mayoría de los bichos con tierra de diatomea y jabón potásico
Tierra de diatomeas
Si cultivas en maceta puedes prevenir desde el comienzo de tu cultivo con tierra de diatomea. Lo ideal es usarla de dos maneras:
Como una capa protectora
Luego de retirar la humedad del borde de la maceta, espolvorea la tierra de diatomeas sobre el sustrato para crear una barrera que impida a los insectos llegar hasta la planta. En contacto directo con este polvo los insectos se secan desde afuera hacia adentro. Esto puedes hacerlo durante todo el cultivo.
De manera foliar
Debes diluir una cucharada en un litro de agua y aplicar de manera foliar en toda la planta y el sustrato. Repite la aplicación al menos una vez por semana. Idealmente, debes usarla solo en la etapa de crecimiento, ya que una vez en la etapa de floración puede caer sobre los cogollos afectando su aroma y sabor.
Jabón Potásico
El jabón potásico, que en algunos formatos contiene también el tan escaso y deseado aceite de neem, puede aplicarse de manera foliar sobre las hojas.
Esto crea una capa resbaladiza que impide que los insectos voladores se adhieran a las hojas y tallos de tu planta.
Si usas ambos productos y controlas la humedad, estarás a salvo de la mayoría de las plagas que puedan atentar contra tu preciada marihuana.
Detectar una plaga en tu marihuana a tiempo es clave
Mientras antes descubras a los invasores, menos daño alcanzarán a hacer a tu planta y tu futura cosecha. Un secretillo de cultivador que funciona bastante bien es poner tiras pegajosas en el cultivo. Si anda algún intruso va a quedar pegado en la cinta y podrás identificarlo antes de que el daño en tu planta acuse la plaga.
Revisar periódicamente el sustrato y las hojas por ambos lados con una lupa, también es una buena idea. Además, tienes que estar siempre atento a cualquier cambio de color o mancha que tengan las hojas, porque casi siempre es indicativo de una plaga o algún exceso o deficiencia de nutrientes.
Tipos de plagas que puedes encontrar en tu planta de marihuana
Si, a pesar de todos tus esfuerzos preventivos, ya te atacaron, no queda otra que identificar al malhechor y buscar el mejor método para acabar con él
Insectos y ácaros
Arañas rojas
Son una de las peores plagas porque se alimentan de la savia de la plata y se reproducen muy rápidamente. Se identifican porque al chupar sabia de las hojas dejan pequeños puntos amarillos.
Si miras la hoja por el revés podrás encontrar pequeños puntos rojos-amarillentos que son las temibles arañas. En una infección muy avanzada pueden cubrir la planta completamente y envolver los cogollos en sus hilos blancos, con lo que quedan completamente arruinados.
La piretrina y el aceite de neem ayudan a prevenir su aparición, pero una vez infectada la planta solo puedes separar las plantas infectadas, bajar la temperatura y elevar la humedad para que no se reproduzcan tan rápido. Si estás en la etapa de vegetación puedes atacarlas con Arañitas de Anasac. Si ya estás en floración, puedes regar la planta con agua a presión para quitar las que puedas o limpiar las hojas una por una con aceite de neem durante 5 días seguidos, pero te advierto que es una batalla campal.
Pulgones
Son bichos de 1 a 3 milímetros con cuerpo blando y colores verdes, amarillos o negros. Los puedes ver merodeando por el tallo y el revés de las hojas.
Chupan la savia y debilitan tu planta, pero difícilmente llegan a matarla. Su mayor riesgo es que pueden transmitir enfermedades, hongos y, gracias a su alianza con las hormigas, colonizan rápidamente.
Lo más importante es aislar la planta infectada antes de que se propague a las demás. Si ya llegaron las hormigas, pon algo de comida en otra parte para que se olviden de tu planta. El jabón potásico es un buen preventivo contra los pulgones, pero si ya atacaron, puedes quitarlos de las hojas uno a uno y aplastarlos como un piojo o aplicar Pulgones de Anasac.
Trips
Una de las plagas más cuáticas de la marihuana y, además, muy común en cultivos de interior. Son insectos pequeños y alargados de color gris o café que se ubican en el revés de las hojas.
Los puedes detectar porque dejan puntos plateados muy chiquitos en las hojas, normalmente con puntitos negros más pequeños cerca (las caquitas💩). También puedes notarlos porque las hojas se vuelven muy quebradizas después de que ya les hicieron chupete.
Estas bestias pequeñas son brígidas, porque pueden transmitirle muchos virus a tu planta. Puedes prevenir su aparición con jabón potásico o aceite de neem. De la misma forma puedes erradicarlos si tu planta todavía no entra en la etapa de floración. Si ya tiene flores formadas tu única opción es conseguir un par de avispas para que se peguen el banquete de su vida.
Orugas
Estos pequeños demonios comen más rápido que Homero Simpson con bajón. Además, no sólo se comen las hojas, sino que también son capaces de entrar a los cogollos y devorarlos, causando que se pudran y queden inutilizables.
La mejor estrategia es estar atento a los huevos para evitar que lleguen a nacer. Puedes encontrarlos, amarillos, pequeños y medio transparentes, al revés de la hoja. Otro indicativo de que tienes orugas son los puntos negros (sí, es caca 💩) y marcas de mordidas en las hojas.
Puedes prevenir su aparición con jabón potásico, pero si ya aparecieron, te van a dar harta pega. Si ves puntos negros, revisa el cogollo directamente superior a la hoja que los tenía. Ábrelo con cuidado y extrae las orugas a mano, una por una. Si se te pasa una sola ya basta para que se coma buena parte de tu planta. Refuerza el tratamiento limpiando las hojas con una infusión de ajo y pimentón.
Moscas del suelo
Es una de las plagas típicas de la marihuana a la que también le dicen mosca del sustrato, mosca negra, o mosca del mantillo. Aparecen como larvas cuando el sustrato está muy húmedo y hay poca intensidad de luz, pero luego se convierten en moscas y se adhieren a tu planta.
Es muy dañina porque afecta directamente a las raíces de tu planta que, como ya hemos visto, es lo más importante de tu cultivo. Además, son portadoras de virus y pueden provocar el surgimiento de hongos como pythium o la botrytis.
Para detectarla puedes remover el sustrato con tu dedo y revisar con lupa en busca de larvas semitransparentes. También, puedes darles pequeños golpes a la maceta para agitar la planta y ver si salen volando de sus escondites.
La mejor manera de prevenir su aparición es controlando la humedad y evitando que se hagan charcos. Deja secar bien antes del próximo riego y mantén el espacio libre de restos orgánicos como hojas caídas. Si ya te atacaron, no es muy grave, muchas veces basta con agregar jabón potásico al agua de riego. Si eso no funciona, puedes conseguir harina de neem y aplicarla sobre el sustrato.
Moscas blancas
Son una de las plagas más comunes en la marihuana pero no es tan dañina. Si agitas una rama y ves una nube de pequeños puntitos blanco volando, ahí están.
También puedes ver sus pequeños huevos blancos en el revés de las hojas y hacen que las hojas se vuelvan amarillentas por falta de nutrientes.
Puedes prevenir su aparición plantando cerca una mata de albahaca para ahuyentarlas o rociando con jabón potásico durante la etapa de crecimiento. Si ya se tomaron tu planta, la opción es limpiar bien la planta con jabón potásico hoja por hoja por al menos 5 días seguidos y rociar también el sustrato. Si no te resulta, anda consiguiendo una avispa con hambre.
Hongos
Oídio
Hay muchas variedades de hongos que pueden atacar tu cultivo. Aparecen, principalmente, por exceso de humedad, pero también pueden ser el resultado de un ataque de plagas en tu marihuana.
Si encuentras alguno de los siguientes, asegúrate de revisar que no haya algún otro invasor detrás de todo el problema.
Este hongo es un verdadero peligro. Aparece tanto en cultivos de interior como de exterior y si llega a tu cogollo lo deja inservible, ya que fumar flores con oídio trae serias consecuencias para tus pobres pulmones. Por suerte, es fácil de detectar. Verás aparecer manchas blancas, como de harina, en las hojas inferiores de tu planta. Luego, las manchas se hacen más grandes y más intensas, trepando por los tallos hasta cubrir los cogollos. Si llegaste a ese punto ya debes desechar parte o la totalidad de tu cosecha. Sorry.
Puedes prevenir su aparición controlando la humedad de tu área de cultivo, manteniendo una buena circulación de aire y aplicando jabón potásico de manera foliar. Si ya lo tienes pero lograste detectarlo temprano, felicidades, aún estás a tiempo de rescatar a tu bella planta. Puedes tratar tu planta con Hongos Foliares de Anasac en la etapa vegetativa o con propóleo en cualquier etapa. Si estás en floración, y quieres ser especialmente cuidadoso, te recomiendo pulverizar con una solución de agua con leche (90% agua y 10% leche).
Botrytis o moho gris
Bajo esas circunstancias aparece la botrytis que se ve como un moho café. Se observa necrosis en las hojas, en las flores e incluso en tallos, cambia la textura, el color muta hacia un gris/pardo y el cogollo se torna amarillo.
Puedes prevenir la aparición con un buen control de humedad, ventilación y jabón potásico de manera foliar. Si ves un cogollo infectado córtalo inmediatamente, antes de que se extienda por el resto de la planta. Incluso, hay cultivadores que cosechan la planta entera apenas ven una flor con botrytis. Para asegurarte, puedes tratar tu planta con Hongos Foliares de Anasac. Lo que es seguro, es que fumarse un cogollo infestado es un atentado contra tu salud que no vale la pena ni un poquito.
Pythium
Este es una de las peores pesadillas del cultivador, porque cuesta mucho diagnosticarlo. El pythium pudre completamente tu planta partiendo por las raíces.
Por lo mismo, a menos que tengas un cultivo hidropónico con las raíces expuestas, no podrás verlo hasta que ya esté bastante avanzado.
En todos los casos aparece por un exceso de humedad, tanto en interior como en exterior. En el caso de las semillas, toman un color muy oscuro, se ponen blandas y, obviamente, no germinan. Para las plántulas es especialmente peligroso y común, se detecta cuando el tallo se adelgaza y alarga, haciendo imposible que sostenga la planta en pie. En una planta más grande impide la absorción de nutrientes, por lo que puede aparecer como una deficiencia con hojas inferiores amarillentas que finalmente caen. Ya en último caso, cuando ya está muy avanzado, vas a sentir un olor muy fuerte a podredumbre.
Puedes prevenir la aparición con una correcta germinación, con buena aireación, control de la humedad del cultivo y manteniendo la higiene de tu área de cultivo. Una maceta aireada, como las Kasvi Air, previenen, también, la concentración de la humedad en las raíces. Si le das hongos beneficiosos, como las micorrizas, te ayudarán a pelear contra el pythium.
Alternaria
Es un hongo que afecta también al ser humano, causando problemas respiratorios y/o irritación en la piel. Se identifica por manchas secas circulares de color gris oscuro, café o negro en las hojas y en el tronco de la planta.
El crecimiento de la planta se estanca y desarrolla carencias por falta de nutrientes. En una etapa más avanzada podrás ver como las hojas comienzan a marchitarse y morir.
Como la mayoría de los hongos se puede prevenir con buena ventilación, control de la humedad, riego controlado y buena higiene en el área de cultivo. Las micorrizas también te ayudarán a prevenir su aparición. Si aún estás en etapa vegetativa y no está muy extendida, puedes acabar con ella separando la planta infectada o cortando la zona afectada. También puedes usar algún fungicida regular como Hongos Foliares de Anasac, aunque no es completamente efectivo. Si estás en floración te conviene, simplemente, eliminar la planta antes de que contamine a las demás.
¿No encontraste la plaga de marihuana que buscabas?
Consulta a nuestros cultivadores expertos en el chat de la web y te ayudarán a prevenir, diagnosticar y erradicar las plagas de tu cultivo
¿Quieres aprender más sobre cultivo y consumo responsable? Revisa, también, mis otras entradas de blog y sígueme en Facebook e Instagram
[…] ya te atacaron, no te preocupes. En primer lugar, revisa mi blog sobre plagas para identificar y erradicar a los invasores. Luego, si no encuentras lo que buscabas, consulta a […]